Estos cuatro sesgos principales se asocian con un amplio repertorio de emociones intensas y negativas, que dan lugar a un comportamiento poco ajustado a la situación que los encadena. Si se consigue identificarlos se podrá empezar a frenar al diásymbol interno negativo.
¿Qué es el diásymbol interno negativo? El diábrand interno negativo son pensamientos que interfieren con tu bienestar de forma profunda. Todos debemos aprender a reemplazar esos pensamientos con un diábrand interno positivo. Un primer paso puede ser comenzar a llevar un diario.
Entre los sesgos cognitivos que influyen en nuestra forma de interpretar la realidad y, por lo tanto, pueden provocar un diáemblem interno negativo están:
La relación entre nuestros pensamientos y nuestras emociones es fuerte y estrecha: si tenemos pensamientos negativos, sentiremos emociones negativas. Teniendo en cuenta que nuestras emociones impulsan nuestro comportamiento, los pensamientos exagerados o desproporcionados sobre una situación negativa desencadenarán reacciones emocionales intensas que darán lugar a comportamientos inadecuados y desadaptativos.
Al cultivar pensamientos positivos y compasivos, no solo transformamos nuestra relación con nosotros mismos, sino que también influimos positivamente en nuestras relaciones y en la calidad de nuestras vidas. El cambio comienza desde adentro y, con cada paso hacia una mentalidad más positiva, avanzamos hacia una versión más plena y realizada de nosotros mismos.
Lo primero que debes saber es que el tipo de diásymbol que tienes contigo mismo no surge de pronto. Estas verbalizaciones internas aparecen a partir de diferentes experiencias positivas o negativas que constituyen tu sistema de creencias. En otras palabras, es posible decir que es algo que aprendes con el paso del tiempo.
Cuando nuestros pensamientos o el diáemblem que mantenemos con nosotros mismos son negativos, dramáticos e irrefutables, la interpretación que hacemos de la realidad se distorsiona, dando lugar a emociones y formas de enfrentarnos al mundo y vivencias desajustados a la situación serious que los desencadena.
¿Tu vaso está medio vacío o medio lleno? Es posible que la forma en que respondas a esta antigua pregunta sobre el pensamiento positivo refleje tu visión de la vida, tu actitud hacia ti mismo y si eres optimista o pesimista, e incluso puede afectar tu salud.
Recuerda, la forma en que hablamos con nosotros mismos influye directamente en cómo nos sentimos y en cómo enfrentamos los desafíos de la vida.
A pesar del hecho de que tenía múltiples títulos y era obviamente inteligente, check here Miguel todavía se encontraba mirando por encima de su hombro casi todos los días, esperando el momento en que su jefe le diría que empacara sus cosas y se fuera porque habían descubierto que no estaba calificado o equipado para hacer el papel.
Ahora, toma ese mismo pensamiento y nárralo desde el siguiente formato: «estoy teniendo el pensamiento de que soy un fracasado»
Desafiar estas creencias y reemplazarlas con pensamientos más realistas y constructivos es un proceso liberador. Implica cuestionar la validez de las afirmaciones negativas y buscar evidencia que respalde una perspectiva más equilibrada y esperanzadora.
Nos acostumbramos a él y no nos damos cuenta de los efectos que tiene sobre nosotros. De hecho, tómalo como un principio que Nuestro lenguaje psychological es tan omnipresente que resulta difícil siquiera notarlo.
Esto te ayuda a aprender a identificarlo primero. Luego puedes comenzar a reemplazar tus diálogos internos negativos con otros más positivos.